Kubrick: Obsesión por el (des)control

Autor(es): Schell, Hernán
Editorial: ASL ediciones
Año: 2022
Ciudad: Buenos Aires

Stanley Kubrick tiene características poco usuales. Por un lado, su nombre es sinónimo de ambición estética y de contenido profundo. Por el otro, es uno de los más grandes productores de imágenes icónicas que ha dado el cine del siglo XX. Baste recordar los títulos de sus películas y a cada una de ellas se le asociará una imagen potente: el desquiciado Jack Torrance de El resplandor, los muchachos violentos de La naranja mecánica, los anteojos enormes en Lolita, la computadora agonizante de 2001. De cada película saldrá un ejemplo inmediato.

Quizás esa combinación de pretensión y éxito le haya ganado el desprecio de buena parte de la comunidad cinéfila, que lo vio siempre como un propagandista sobrevalorado. A esa comunidad pertenece Hernán Schell, lo cual le agrega a este libro una capa de interés extra. Schell no solo conoce de manera minuciosa la obra de Kubrick, sino que se formó en la crítica de la mejor manera: argumentando en minoría en un marco de discusión franca. Así, el libro es apasionante para los admiradores de la obra del director, pero también para sus detractores, que encontrarán consistentemente discutidas todas sus objeciones. La capacidad de Schell para pensar el cine es aparentemente inagotable: una creatividad bulliciosa combinada con un rigor metódico implacable. Algo que a Kubrick le habría encantado.

Gustavo Noriega

$22.000

Sin existencias

Únete a la lista de espera y recibe un mail cuando este producto este disponible.

Descripción

Stanley Kubrick tiene características poco usuales. Por un lado, su nombre es sinónimo de ambición estética y de contenido profundo. Por el otro, es uno de los más grandes productores de imágenes icónicas que ha dado el cine del siglo XX. Baste recordar los títulos de sus películas y a cada una de ellas se le asociará una imagen potente: el desquiciado Jack Torrance de El resplandor, los muchachos violentos de La naranja mecánica, los anteojos enormes en Lolita, la computadora agonizante de 2001. De cada película saldrá un ejemplo inmediato.

Quizás esa combinación de pretensión y éxito le haya ganado el desprecio de buena parte de la comunidad cinéfila, que lo vio siempre como un propagandista sobrevalorado. A esa comunidad pertenece Hernán Schell, lo cual le agrega a este libro una capa de interés extra. Schell no solo conoce de manera minuciosa la obra de Kubrick, sino que se formó en la crítica de la mejor manera: argumentando en minoría en un marco de discusión franca. Así, el libro es apasionante para los admiradores de la obra del director, pero también para sus detractores, que encontrarán consistentemente discutidas todas sus objeciones. La capacidad de Schell para pensar el cine es aparentemente inagotable: una creatividad bulliciosa combinada con un rigor metódico implacable. Algo que a Kubrick le habría encantado.

Gustavo Noriega

350 págs.

Valoraciones

No hay valoraciones aún.

Solo los usuarios registrados que hayan comprado este producto pueden hacer una valoración.