Descripción
Las montañas y los ríos, las plantas, el sol, los animales, elementos que conforman la vida en la tierra, son parte de la trama que organiza y nutre la poesía de Gary Snyder, voz inconfundible de la contracultura estadounidense.
Con auténtica intención ecuménica, recoge creencias propias del trascendentalismo y de las religiones no teístas de oriente, de Thoreau y de Dōgen Zenji, como también del poeta y ensayista Kenneth Rexroth, quien lo aproxima a ideales anarco-pacifistas y lo conecta con otros escritores de su época.
Su obra, cercana a tradiciones orales, registra saberes transmitidos desde muy atrás, elaborando las versiones de mitos y tótems indígenas para ponerlas en juego a la hora de interpretar nuestra pertenencia al mundo natural.
Gary Snyder, quien invitó a los beat a bajarse del auto para volver a caminar, transmite en su trabajo conciencia y placer, atendiendo con detalle a la condición salvaje y compartiendo la santidad de pequeños actos cotidianos: beber agua de un pozo, cruzar un río o preparar tarros de conservas caseras.
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